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Ya sea que estés interesado en cambiar de trabajo, abrir un nuevo negocio o comenzar como freelancer para aumentar tus ingresos; seguro ya sabes que es muy importante que te des de alta en el Sistema de Administración Tributaria (SAT), pero lo primero que debes hacer antes de realizar el trámites es saber cuál es tu régimen fiscal para que comiences con las obligaciones y derechos tributarios que te corresponden por ley.
Un régimen fiscal es el conjunto de leyes y normas que rigen la situación tributaria de los contribuyentes, ya sean personas físicas y/o personas morales), al momento de registrarse en el SAT. Esta institución es la que determina los derechos y obligaciones fiscales que las personas deben cumplir de acuerdo a la actividad económica que realizan y, por medio de la cual, perciben sus ingresos.
Cuando las personas comienzan a recibir un ingreso económico (sin importar el monto) por realizar algún tipo de actividad, tiene por obligación darse de alta en el Sistema de Administración Tributaria e incorporarse a alguno de los regímenes fiscales que reconoce. Tu incorporación al régimen fiscal dependerá del tipo de actividad que realices así como el monto de los ingresos que percibes.
En México, se consideran 2 tipos de personas fiscales: las físicas y las morales.
Se define como persona física a todos aquellas personas que realizan cualquier tipo de actividad económica, por lo que tienen derechos y obligaciones tributarias. Por tanto, son todos aquellos individuos que realizan cualquier actividad que les aporte ingresos económicos y que reúnan las siguientes características:
Cualquier persona que quiera darse de alta puede hacerlo acudiendo directamente a las oficinas del SAT o puede iniciar su trámite en su portal en línea.
Es muy importante que sepas que darte de alta en el SAT y cumplir con tus contribuciones a tiempo, te facilitará las cosas a la hora de solicitar préstamos o créditos hipotecarios, ya que tu historial fiscal forma parte de tu historial crediticio.
El SAT establece que las personas morales son “entidades reconocidas por ley como sujetos de derechos y obligaciones. Suelen ser creadas por un grupo de personas que se unen con un fin determinado, como las sociedades mercantiles, las asociaciones y sociedades civiles”.
Para poder registrarse como persona moral se deben reunir las siguientes características:
Al igual que las personas físicas, el régimen de las personas morales dependerá del giro de la empresa y de las actividades que se realizan.
Los regímenes fiscales para personas físicas reconocidos por el SAT son los siguientes:
Son todos aquellos contribuyentes que realizan actividades empresariales o que prestan servicios de forma independiente.
En el caso de las actividades empresariales, es necesario que el negocio cuente con una estructura empresarial, es decir, tenga empleados, oficinas, puestos determinados, entre otros. En este apartado podemos considerar actividades económicas comerciales, industriales, ganaderas, o agrícolas.
En el RAEP también encontramos a todos aquellos que realizan actividades profesionales especializadas de forma independiente. Es decir, son todos aquellos profesionistas que necesitan contar con un título profesional para ejercer sus funciones de forma independiente, como lo son los médicos, abogados, personal de enfermería, arquitecto, profesores, entre otros.
De igual manera, en este régimen también se considera a las personas laboran bajo honorarios, asimilados a salarios, por proyecto o freelancers que, si bien no necesitan un título para realizar sus actividades, deben de contar con estudios específicos para desempeñar sus funciones, como ocurre con áreas como programación, marketing o relaciones públicas.
Se refiere a los individuos que perciben ingresos por rentar o subarrendar inmuebles (departamentos, casa habitación, terrenos, bodegas, locales comerciales o edificios).
Son las personas que trabajan para un solo empleador/empresa, estando vinculados por un contrato laboral. Por ello, estas personas reciben un salario y prestaciones así como la participación de utilidades derivadas de sus actividades. Además, pueden recibir una indemnización por separación de su empleo si su despido no es justificado.
Las personas que se encuentran en este régimen no están obligadas a presentar su declaración anual, ya que sus empleadores son los que están obligados a realizar las retenciones y deducciones contempladas en la ley. Solo en los siguientes casos, los asalariados estarán obligados a realizar su declaración anual ante el SAT:
Régimen Simplificado de Confianza (RESICO)
Aquí deben darse de alta todos aquellos individuos con ingresos anuales menores a $3,5000,000 MXN y que tributen en cualquiera de estos 2 regímenes fiscales:
Para darte de alta en el SAT tienes dos opciones, la primera es iniciar un pre-registro en línea y la segunda es acudir directamente a cualquiera de las oficinas con las que cuenta SAT y realizar el trámite directamente con ellos. En ambos casos, deberás presentar los siguientes documentos:
El día de tu cita, no olvides tramitar tu contraseña y e.firma para poder emitir facturas y realizar tus declaraciones.
Ahora que tenemos claro qué es un régimen fiscal y los tipos de regímenes fiscales que existen según el tipo de actividad económica que realizas; es importante que te asegures de estar en el régimen correcto para poder cumplir con tus obligaciones tributarias.
Si tienes dudas sobre cuál es tu régimen fiscal, no te preocupes, es muy fácil saberlo. Este dato lo encontrarás en tu Constancia de Situación Fiscal, la cual puedes descargar del portal del SAT o bien a través de nuestra aplicación de una forma rápida y sencilla.
Así de rápido puedes obtener tu Constancia de Situación Fiscal, conocer tu régimen fiscal y compartirla por Whatsapp. Lo mejor es que el trámite es totalmente GRATUITO.
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